Crufi: la verdad oculta.

A unos días de terminar el año 2014 , cuando todos nos encontrábamos en los supermercados llenando nuestros carritos, porque todos sabemos que en los fines de año el mundo se puede acabar, llenamos nuestra casa de provisiones, y hacemos una gran cena la cual será la última gran cena o en todo caso tenemos que morir con la panza llena, o mejor dicho morir comiendo no estaría mal.

Todos al sur del ecuador, en ese preciso momento, entre las gondolas del supermercado tomamos una decisión muy importante, una decisión que puede afectar nuestra vida familiar de forma rotunda. Hay que comprar el helado de 5 litros, perfecto para que toda la familia se deleite en su última cena con el manjar refrescante de azúcar, leche (o agua), y varios químicos que seguramente no afectan la salud humana. Ya encontrándonos en el supermercado,

nos enteramos que una marca de helado de consumo de clase media le debía su exquisito sabor a coliformes y otro agentes biológicos de la caca.

Justo frente a la góndola de helados debo de cambiar mi opción de consumo ya que comprar helado con popo no esta bien visto, a mi familia le podría horrorizar comer el helado con popona en público. Justo cuando iba a experimentar el gusto premium 2014 en mi paladar.

En mi desconsuelo le pregunte a dios ¿Porque hoy 29 de diciembre, porque? La multa fue en setiembre y justo hoy el día de mis compras sale en los medios de comunicación.  Y ahi  me encontraba entre un mar de gente, llorando internamente, todos al mi alrededor sólo empujaban el carrito y peleaban por el último turrón y yo perdido y solo, con un gran reto por delante, cambiar la opción de helado.

Muy bien pues me puse a recordar los comerciales de helados que hubieron en 2014 y no recuerdo ninguna. OH dios, la clásica propaganda de de navidad de crufi no se repitió este año. Estoy perdido, mi mundo ya no tiene sentido.

Pero oye chico, me dice una voz en mi interior, recuerdas esa propaganda de marca extranjera con esa musiquita tan cool…

y ahí vino a  mi mente Arcor. (misteriosamente, no pude encontrar, la propaganda de helados Arcor, en los medios de tv pública de Uruguay)

Esta propaganda contenía una música adictiva, he imágenes de gente feliz consumiéndolos, yo también quería ser feliz.

Y ahí compre dicha marca extranjera, cosa que creo que hizo mucha gente, evitando los helados de POPO.

Analizando este efecto en mi, me hizo reflexionar que si yo fuera el dueño de Conaprole o Arcor o de otra marca de helado hubiera pasado un muy buen feliz termino de año. Por lo cual creo que aquí hay indefectiblemente un plan de desestabilización,  proveniente de una marca que querría ocupar el segundo lugar en el nicho de consumo de helados en Uruguay.

Por lo cual tome la decisión firme de apoyar la industria uruguaya y consumir nuevamente mis queridos crufis, que los organismos de salubridad ya confirman que todo esta sin popona.